Lorea Agirre, nutricionista: "Si estás muy inflamada, te cuesta digerir o cenas tarde, una fruta muy fría puede darte molestias"
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La inflamación abdominal es una de las molestias digestivas más comunes y puede estar relacionada con los malos hábitos y no siempre con los alimentos en sí mismos. Como ha señalado la nutricionista Lorea Agirre, muchos pacientes asocian estas molestias a la fruta en la cena, un mito que la especialista ha querido matizar en su perfil de Instagram.
Diplomada en Nutrición Humana y Dietética por la Universidad de Navarra, Agirre cuenta con formación en psiconeuroinmunología, neurociencia y nutrición funcional. Desde esa perspectiva integral, explica que lo importante no es la fruta en sí, sino el estado digestivo de cada persona en el momento de consumirla. "¿Comer fruta por la noche inflama? Este es uno de los mitos que más escucho. (...) No es tanto la fruta, sino cómo está tu digestión a esa hora, cómo la combinas y cómo te sienta a ti", señaló.
La fruta por la noche, ¿sí o no?Agirre subraya que la clave está en escuchar al cuerpo y valorar cada situación. "Si estás muy inflamada, te cuesta digerir o cenas tarde, una fruta muy fría o con mucho azúcar puede darte molestias", explicó. Sin embargo, añadió que en otros contextos la fruta puede ser una opción ligera y positiva: "Si cenas temprano, estás tranquila, una fruta como melón, manzana o papaya puede ser una opción ligera, incluso digestiva".
Para la especialista, la alimentación no se reduce a prohibiciones absolutas, sino a la capacidad de adaptarse a los ritmos individuales. "La fruta no es el problema. El contexto sí", recordó en su mensaje, invitando a reflexionar sobre la importancia de personalizar la dieta en lugar de seguir normas genéricas.
La nutricionista también advirtió sobre la frustración que generan las dietas restrictivas que no tienen en cuenta las particularidades de cada persona. "¿Has hecho mil dietas y sigues sintiéndote hinchada, cansada, frustrada? No es falta de voluntad. El problema es que muchas dietas son genéricas, y tú no", señaló, insistiendo en que cada organismo requiere un enfoque individualizado. En ese sentido, destaca que lo que realmente funciona es aprender a identificar las señales del propio cuerpo y adaptarse a ellas. "Tu cuerpo, tus ritmos y tu historia no caben en un menú estándar", remarcó.
La especialista compartió una receta sencilla y eficaz para reducir las molestias digestivas: una infusión a base de agua caliente, jengibre y menta. "¿Tripia hinchada, gases o sensación de pesadez? Esta infusión es un clásico que siempre rescata. (...) Beneficios que vas a notar desde la primera taza: alivia la hinchazón, reduce los gases y te reconecta con tu cuerpo (y con tu calma)", explicó.
El Confidencial